Me mata la espera, el peligro inminente de estar a tu lado... sola a tu merced, para cumplir tus deseos, la intrigante pregunta de los actos, el sofocante pensamiento de un marco cromático, el corazón conteniendo la duda; el cuerpo se niega esperar este dichoso placer, pero el tiempo no se puede manipular, y la espera es mayor a cada segundo, sin poder desviar la mente de ti.
Delicioso!!
ResponderEliminarToño