Fotografía por: Lux Profundi
https://www.facebook.com/luxprofundi
Modelo: Fobidden-Rose
Me alejé de ti, tomando un objeto de la diminuta mesa en
donde se encontraban todos los juguetes.
Con mi mano derecha retiré la venda de tus ojos y cuando los abriste te mostré aquel dildo.
-¿Lo quieres?
-Si, por favor.
-Nuevamente sin modales, eres incorregible pequeña.
Me incliné para besarte, sin embargo no lo hice, solo jugué
contigo, amaba la forma en la que hacías lo posible por acercarte a mí, como
abrías tus labios, invitándome a entrar; sujeté tu cabello haciendo que me
miraras directamente a los ojos, tu carita me dejaba sin aliento, que bella e
indefensa; sentí compasión y te besé rápidamente con mis labios cerrados.
Te di mi mano; la besaste apasionadamente hasta que la retire, llevándola a otras
partes de tu ser.
-Levanta bien tus caderas- Así lo hiciste y yo coloqué dos
almohadones grandes debajo de ellas.
Me abalancé en tus piernas, quería mantenerte inmovilizada,
la vista era espectacular, tu culo apenas rosado, tu espalda roja completamente
y tu brillante hendidura lograron excitarme.
Pellizqué tus labios, tus gritos solo lograron conseguirte
mayor sufrimiento; mi lengua probó tus jugos una y otra vez; mientras tu
hendidura palpitaba con mayor intensidad.
-Por favor – gemiste- Por favor, lo necesito.
No presté atención, sabía a lo que te referías, deseabas
tenerme dentro tuyo; anhelabas tener aquel dildo en ti...
-No lo conseguirías
fácilmente-Pensé. y seguí ignorando tus suplicas.
Cuando tus gritos me satisfacían lo
suficiente adentraba uno o dos dedos en ti, los movía brusca o suavemente
mientras los giraba para causar distintas sensaciones, pero no permanecía en ti
mas de unos segundos, no; mi placer era tortúrate con el tuyo.
-Te lo suplico, ya no lo soporto – una sonrisa maliciosa
surgió en mí.
Acerqué el dildo y cuando lo sentiste gemiste suplicante.
-Si, si, si, por favor, te lo suplico, necesito alcanzar el
clímax.
Introduje la punta de aquel juguete y presencié como
apretabas tu cuerpo, estabas a punto de alcanzar el orgasmo, eras completamente
mía; pero no era suficiente, no me hablabas con respeto, sabía que si
introducía aquel objeto tendrías un orgasmo inmediatamente y eso no lo permitiría.
Adentré el dildo un poco más, para posteriormente sacarlo,
repetí esta tarea varias veces, cada que lo sacaba intentabas persuadirme con
bellos comentarios, pero buscaba llevar tu castigo al máximo nivel de
placer.
Deje el dildo de lado y humedecí mi dedo índice en ti, para
meterlo en otro sitio.
-Aaaaay!- gritaste al sentir mi dedo en tu ano.
-No te has comportado como me complace.
-Pero he hecho todo cuanto has querido.
-No mientas.
-¿Qué quieres de mi?
-Es una pena que debas preguntar cosas tan obvias- dije
fríamente adentrándome más en ti, solo para causarte esa incomoda y deliciosa
sensación- Empecemos por eso exactamente ¿Cómo es posible que te atrevas a
hablarme con tanta familiaridad?
-Disculpa- un fuerte azote cayó en tu culo –Disculpe-corregiste.
-Eso está mejor.
Tu cabeza se giró, desafiante, tu rebeldía iniciaba a
apreciarse, no está en tu naturaleza humillarte o dar poder a alguien; solo
buscas tu placer y cuando se trata de dar respeto a alguien inmediatamente tu
juego cambia. No te reprendí por aquella osadía, me entretenían tus falsas
esperanzas, creías que sería como los demás, mas estabas muy equivocada.
Lograría que te sometieras, lograría que me suplicaras y
humillaras ante mí...
Ahora has leído mis deseos; te encuentras húmeda, no
intentes negarlo ¿Qué pretendes hacer?
Buena historia y bien escrita, Evelyn.
ResponderEliminarBesos.
Gracias Ohma, Saludos.
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