Un espacio de silencio y un momento vacio, un estado
extraño en donde no existe mas que la nada y conforme pasa el tiempo florecen
sentimientos pintados en palabras y las letras me recuerdan al contoneo de tus
caderas, el vacio se trasforma en ti, encendiendo el erotismo; el delirio se
presenta en forma de lujuria, en un frenesí de imágenes que no puedo controlar
y cada una excita mi cuerpo, conduciéndolo por brasas pasionales.
Un vacio que se va llenando de sensualidad y deseo.
ResponderEliminarSon vacios que nos hacen querer sentirnos vivas.
Besos.