Me ha despertado nuevamente la melodía añorada, aquella que
resuena y sana mi alma; el canto susurrante me invita a seguirlo; esta vez, no
pretendo resistirme ante el ocaso encarnado. Mis pies descalzos se hunden en la
arena; alzo la mirada, contemplando por última vez el risco plateado; los
corceles de espuma guían mi camino a las profundidades turquesa, siento sus
manos por mi cuerpo; cierro los ojos, ahogándome en ellas.
QUE HERMOSO :)
ResponderEliminarUN BESAZO EVELYN!!!
Gracias :3
EliminarUn abrazo.
Que hermoso
ResponderEliminarGracias y bienvenido a este, mi mundo.
EliminarUn Saludo.